6 mar 2012

Predicar con el ejemplo

 Hace una semana el Presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, hacía unas declaraciones que no hacían más que encender la maltrecha moral de los jóvenes del archipiélago, en sus declaraciones Paulino Rivero pedía a los jóvenes que se esforzasen como habían hecho sus abuelos e incluso les invitaba a partir de las islas en busca de un futuro mejor, queda claro que el propio presidente canario no hace una apuesta clara por la generación más preparada que ha tenido Canarias, es más prefiere perderlos antes de que sigan engrosando unas listas del paro ya abultadas de por sí, una buena forma de reducir el número de parado pero un futuro negro para la tierra que tanto defiende, Canarias.

 A raíz de estas declaraciones, la actual Directora General de Juventud del Gobierno de Canarias, Estefanía Castro, decidió pasar un idílico fin de semana en un hotel de lujo al sur de Tenerife, una gran forma de alentar a los jóvenes a seguir en su lucha para salir adelante, ésta señora viene a demostrar, una vez más, que la clase política vive ajena a la realidad que les rodea, cierto es que cada uno con su dinero puede hacer lo que quiera, pero también ella es ejemplo para muchos y la situación no está para hacer alardes del sueldazo que está cobrando del erario público.

 A la actitud de Estefanía Castro podemos la de todos aquellos políticos que piden más esfuerzo a la sociedad para salir de ésta situación, esos mismo que no son capaces de abandonar el coche oficial, sus escoltas privadas, sus grandes sueldos, por ello los políticos deben ser moderados, que no austeros, ya que cada uno cobra el sueldo que cree que merece su sueldo pero si deben hacer ejercicio de responsabilidad y no alardear de una calidad de vida superior, con el dinero que pagamos todos, y que no hace más que seguir destrozando la imagen de la política.

 Hoy hemos podido ver que algunos, más que preocuparse de solucionar problemas, se preocupan más de crearlos y evadirlos haciendo grandes alardes. Por ello señor Paulino Rivero, antes de solicitar esfuerzos a la sociedad, obligue usted a que sus cargos de confianza prediquen con el ejemplo.

3 comentarios:

  1. Este comentario recuerda a aquello que se hacían cuando en España volvía a ser el socialismo una opción política, y desde la derechona más rancia, se decía "Si tan socialista eres, reparte lo que tienes".
    Es decir, que si esta señora, a la que no tengo el gusto de conocer, tiene dinero suficiente, para generar empleo en canarias, en el sector servicios. Pues repito, según ustedes se tiene que quedar en casa y no gastarse un duro, sin hacer gasto alguno, y colaborando a que aumenten las listas del paro.
    Hay que animar al canario, a visitar nuestros hoteles y restaurantes, consumir y disfrutar, que son dos días, amigos.

    ResponderEliminar
  2. Excma. Señora Estefania, cuando termines por Tenerife, te esperamos en Gran Canaria, verás los hotelazos que tenemos en la isla redonda, verás que playas, que piscinas y que gastronomía.
    Y a ver si te sacan en todos los periódicos, pero no solo en los locales, llamaté a los nacionales y nos haces publicidad, que nos viene estupendamente.
    Los tenemos por toda la isla, en el sur, en la capital, y muchas viviendas rurales que son todas preciosas.
    Animo Estefania te esperamos.

    ResponderEliminar
  3. Pero que futuro van a tener nuestros jóvenes, cuando todo lo que compramos se produce fuera, aquí en estas islas, ya no se fabrica nada, la ropa y zapatos se hace en china, los alimentos vienen congelados o refrigerados de fuera gestionada por grandes almacenes a los que nadie puede hacerles la competencia, la agricultura es deficitaria y no es rentable en canarias, no disponemos de materias primas, ahora dicen que tenemos petróleo pero no queremos sacarlo, Solo podemos ofrecer ocio, y además tenemos que competir en este mercado, Primero entre nosotros, cada isla quiere su trozo de tarta y luego con otros destinos, más cerca de Europa y con más oferta y ventajas.
    Entonces ¿que hacemos?, como canarias viene de tierra de canes, a este paso solo nos queda ladrar.

    ResponderEliminar